Tras es el estreno de su película, Nahir Galarza rompió el silencio. La joven, condenada a prisión perpetua por el asesinato de su novio Fernando Pastorizzo, da su testimonio en una serie documental que puede verse desde esta semana.
El material, que también está disponible en Amazon Prime Video, tiene dos capítulos y se titula “Nahir: el secreto de un crimen”. Este tiene un enfoque más íntimo y revelador, y se muestran testimonios directos de la acusada desde la cárcel donde cumple su sentencia.
Atribuyen a Nahir Galarza un noviazgo hecho en la cárcelLa joven de 24 años habló de su infancia y de su padre, a quien aseguró que admiraba a pesar de que no mantenían una relación “cercana”. También mencionó a su mamá y contó detalles de cómo era su noviazgo con Pastorizzo. “Es complicado porque tuvimos distintas etapas”, comenzó diciendo, según reprodujo TN.
“Los dos sabíamos que no teníamos una relación seria... Que nunca nos íbamos a presentar a nuestra familia, que nunca íbamos a poder hacer cosas de pareja, pero a la vez nos seguía molestando que el otro hiciera algo”, agregó.
"Nahir Galarza": 10 diferencias entre ficción y realidad de la película del momentoDespués, Nahir aseguró que las cosas entre ellos iban empeorando mientras pasaba el tiempo. “Nos separábamos y estábamos mejor, pero a la vez nos sentíamos mal y por eso volvíamos a hablar. O por ahí yo lo veía llorar y me daba mucha tristeza y me sentía culpable también o terminaba apareciéndose en mi casa, no sé, a las 2 de la mañana porque sabía que todos dormían”.
“La situación se fue agravando y fue poniéndose todo más violento. Se enojaba mucho y se ponía de una manera que yo nunca lo había visto”, expresó.
Luego, detalló distintas actitudes que Fernando había tenido con ella y reveló que sufrió violencia de género por parte de él. “Una vez Fernando rompió su propio celular. Después ya directamente empezaron los golpes hacia mi, después ya me empezó a pegar a mi”, contó. “Siempre era por lo mismo, o por celos o porque hacía cosas que no le gustaban, o por la ropa que me ponía o porque se enteraba con quién me hablaba”, afirmó.
“Lo único que quería era que la terminara, entonces le decía que era todo mentira o le pedía perdón. Todo para que él se calmara. Es como que no sabía cómo defenderme tampoco”, finalizó.